El camino del artista...

será distinto al del caminante, que hace camino al andar?

No, no es distinto, es igual.  Es igual pero distinto.  Quiero decir, el concepto es ese, que el camino se va a haciendo, pero cada uno es distinto.  Ahí está.

Vuelvo al título de este post.  Estoy leyendo el libro homónimo, de Julia Cameron.  La verdad es que la primera vez que lo tuve en mis manos, hace ya un buen par de años, no me convenció ni un poquito.  Me pareció tan yanqui, tan "tú puedes", que no pasé de la primera semana de ejercicios (y son 12 las semanas a trabajar...).  

Es más, llegué a sospechar que mi profe de ilustración y una compañera que también me lo había recomendado efusivamente, eran las editoras o recibían comisión por cada naba que, como yo, creía que un bloqueo creativo, se borraba de un plumazo con leer un libro.

Pero como soy una caradura que se lo presté a una amiga que es una capa escribiendo y ahora no hace ni la lista de las compras, y le dije: hace los ejercicios, te van a re ayudar... pero hacelos, eh?

De todas formas, también le confesé que a mi no me había interesado, pero a lo mejor a ella le servía.  

Imaginen lo que pasó: el librito en cuestión, quedó re lindo en la biblioteca de mi amiga... 

Peero, siempre hay un pero, en este año, dos personas que yo quiero mucho y considero super creativas, me contaron que lo estaban leyendo, estaban haciendo los ejercicios y escribiendo las famosas páginas de la mañana, y lo mejor: estaban logrando un cambio.

Y lo retomé. 

Bueno no, retomar sería continuar con algo que ya se había empezado y momentáneamente estaba suspendido.  

Corrijo: Empecé el camino del artista.  

Estoy encontrando algunas dificultades, no sé si propias de mi negación, de la traducción del libro, o de la falta de información.  Necesito consultarle a alguien que lo haya hecho, estas dudas que tengo.

Hay un coach visitando esta plaza, cerca de esta hamaca? Algún entendido en la materia?

Mientras tanto, yo estoy acá.

Claro que no me hago ilusiones de que la ruta sea tan recta y libre de obstáculos, pero ahora ya me encapriché: quiero ver qué hay al final del camino.